El himno de la vergÜEnza
ROAD TO NOWHERE
Ahí os dejamos un vídeo que ha realizado nuestro compañero Xabi Luna de su estancia como voluntario en la isla de Quíos:
LLEGADA DE REFUGIADOS A QUIOS: SUS VOLUNTARIOS from XALUBRE on Vimeo.
Gente sin futuro
empuja a una familia con hijos pequeños a abandonar su tierra, su país, su casa
para embarcarse en una dura y peligrosa carrera hacia ninguna parte. Muchos han
perdido la vida en esta desesperada huida. Encontraron la muerte cuando
precisamente escapaban de ella en Siria o Irak.
familia atrapada durante meses en un campamento de refugiados cuando te dicen
entre lágrimas que prefieren volver al sitio de donde huyeron? ¿Qué ha hecho mal Europa para que la vida de
esta gente sea ahora aun más horrible que la que tenían en Siria?
nuestra visita al campamento de Vasilika. Allí es donde trasladaron a todos los
refugiados que atendíamos en Eko. La madrugada del pasado lunes la policía
entró en el campamento y los metieron en autobuses para trasladarlos aquí.
Cuentan los cooperantes que fueron testigos que las escenas eran dramáticas.
Las mujeres lloraban y los niños se agarraban entre sollozos a las piernas de
los voluntarios. No sabían donde les llevaban ni lo qué les esperaba. Lo que sí
sabían seguro es que ya no iban a tener la ayuda, el cariño y el calor
solidario de todas las personas que trabajaban como voluntarios en el campo de
Eko. Se lo estaban arrancando.
que soportar los desprecios y las pedradas de un grupo de gentuza indignado por
la incómoda presencia de los refugiados cerca de sus casas.
militar y policial carece de condiciones para acoger a tantos refugiados. No
hay agua potable, la comida es muy mala y las tiendas se agolpan encerrados en
el interior de una gran nave abandonada donde hace un calor insoportable. Pero es
sobre todo un lugar deshumanizado. Aquí no llega el cariño ni el apoyo afectivo
de los cooperantes voluntarios que actuábamos en Eko. Aqui no hay nadie que
cubra esa necesidad tan importante para ellos.
vez más incierto. El desánimo y la desesperación se están apoderando de ellos.
Han llegado al punto en el que prefieren morir por una bomba en su tierra antes
que ser condenados a una muerte lenta por la inacción y el abandono de esta
Europa ciega e insolidaria.
debería vivir en todas sus vidas.
sólo aflora en un inocente dibujo.
Muestras de apoyo
El cariño más grande y las sonrisas más bonitas…
Otro mazazo para nuestra ilusión
El día anterior vimos llegar dos familias que venían andando desde Thesalonika a más de 60 km. Llevaban crios de 5-6 años y una de las mujeres presentaba un embarazo ya avanzado. Esa tarde había caído una formidable tormenta y después hizo calor. Les ofrecimos fruta y te rompía el corazón ver cómo se tiraban los ñiños a ella.
Queríamos volver al día siguiente y llevarles comida, leña, aceite…….pero ya no hubo día siguiente.
Ayer cuando nos despertamos nos llegó la noticia de que había comenzado el desalojo de Hara y BP. Un «deja vu», otro mazazo para nuestra ilusión. También de madrugada llegó la policía y todo se acabó.
Nos quedamos sin refugiados que atender y nos quedamos vacíos por dentro. No es sólo el cambio de condiciones para los refugiados. El no poder hacer nada por ayudarles es una sensación muy frustrante.
Cuando las necesidades están dentro y la ayuda fuera sientes rabia e impotencia.
Nuestros compañeros de EREC van moviendo hilos. Necesitamos conseguir permisos para poder llevar la ayuda a estos campamentos y ese será nuestra labor en estos próximos días.
Demasiadas incógnitas
Es cierto que se nos plantean dudas e incógnitas por todas partes. Al desalojo de Eko, le sigue en el día de hoy el del asentamiento del Hotel Hara que muy probablemente ira unido al fin definitivo de BP.
Habrá que ver donde somos útiles, que cometidos podemos desempeñar y si hemos de trasladarnos a otra zona.
Tampoco sabemos si seremos bien recibidos en los campos militares, donde al parecer las condiciones no son las que se debieran esperar de una instalación tutelada por el Gobierno. Dudas, las nuestras, importantes e insignificantes a la vez.
Realmente las dudas, incógnitas, quebraderos de cabeza, depresiones, lamentos, el dolor inmenso en los corazones, lo tienen todas estas personas con las que hemos estado conviviendo. Es doloroso no poder contestar a todas las preguntas que se le pueden ocurrir a un niño aunque no las llegue a plantear.
Desgarrador subir a un autobús que te aleja del deseo de acercamiento a un mundo civilizado, sin saber cual será el destino que te han asignado a ti y a tu familia.
Tanto como ver a una excavadora llevándose por delante lo que ha sido tu hogar durante unos meses, cortos pero intensos.
Mosquitos, falta de agua potable, comida de mala calidad son cuestiones que hacen muy duro el día a día, pero no comparables a la incógnita sobre el futuro y la falta de empatía de una Europa que mira hacia otro lado y que priva también a los refugiados del calor humano.
Sexto relevo. Nuestra labor continúa
Unos llegan y otros se marchan, …….pero los refugiados siguen atrapados en los campamentos de Grecia. Es una constante para ellos ver continuamente como las personas que vienen a colaborar en los campos como voluntarios vienen y se van. Se han acostumbrado a ello pero siguen ofreciendo el mismo cariño a los recién llegados como nosotros. Somos el sexto relevo en estos meses. Llegamos el pasado lunes día 6 y desde el primer momento te vas empapando de todas las sensaciones que produce entrar en un campamento de refugiados. las sensaciones muchas veces no se trasmiten a través de la pantalla de televisión y sólo entrando aquí las puedes empezar a sentir.
No importa las veces que hayas visto las imágenes en el telediario. La primera entrada impacta. Sientes la desolación, el desgaste de los meses atrapados que van pesando en esta gente, el hastío. Afortunadamente también la alegría y la ilusión de muchas personas que trabajan incansablemente por un día a día mas digno para los refugiados. Y, como no, la sonrisa de todos esos niños y niñas que siempre pululan a nuestro alrededor y que nos parece increíble aun mantengan después de tantos meses huyendo de la guerra y de la propia muerte.
A nuestra llegada encontramos un campamento como Eko que nos ofrece una imagen menos dura, ya que la ayuda llega bien y reúne mejores condiciones, tristemente, a estas horas Eko Station ya es historia, ha sido barrido, si es que hay alguna posibilidad de barrer la historia de miles de personas que luchan por sobrevivir. Ha sido una dura jornada pero nadie nos dijo que iba a ser fácil.
Los campamentos mas cercanos a la frontera de Macedonia como Hara y BP presentan peores condiciones, la gente esta mas desesperada por cruzar la frontera. Aquí ademas es mayor la población proveniente de países «fuera de la zona de conflicto» como Pakistan, Argelia…y que por tanto no se consideran refugiados propiamente. Son sencillamente ilegales.
Estos campamentos han ido mermando. Algunos refugiados han retrocedido terreno hasta campamentos militarizados.Muchos, habiendo cruzado la frontera de Macedonia han sido capturados y expulsados de nuevo, teniendo que volver derrotados a Hara o BP, donde volverán a intentarlo otra vez.
Encontramos cerca, escondidos en una construcción abandonada, a una comunidad de pakistaníes de la que ya nos habían hablado nuestros compañeros. Su situación sigue igual. Sólo están allí porque su obsesión es cruzar la frontera, y lo intentaran todas las veces que haga falta.
En Grecia cada día que pasa es un día mas y puede ser también un día menos.
Nuestra labor continúa y seguirá mientras queden familias por atender, aunque cierto es que el desalojo de Eko nos obliga a replantearnos los trabajos en Hara, BP y demás asentamientos cercanos. En todo este tiempo hemos estado colaborando con grupos como EREC ( bomberos de Cataluña) y G- Fire (bomberos de Castilla León). Son gente fantástica, muy trabajadores y organizados. Esta colaboración sin duda ha facilitado nuestra labor aquí y cada vez trabajamos más coordinados. Ahora, como bomberos de Navarra, se nos ofreció encargarnos de la gestión del reparto de vegetales en Hara y BP, así que nosotros nos encargamos de la lista de compra, preparar las bolsas con la comida y hacer el reparto tienda por tienda. Estamos encantados de ir asumiendo responsabilidades en las tareas de cooperación. Seguimos además llevando camiones de leña a los campamentos.
Vamos conociendo gente nueva y vamos llegando hasta personas determinadas que tienen un peso específico aquí. Un ejemplo es Aslam, un sirio residente en Europa que se ha trasladado aquí para ayudar. Él lleva el control no sólo de los campamentos sino también de los grupos de voluntarios y de las tareas que desarrollan. Su labor es fundamental y puede ser nuestra llave de entrada en un futuro no muy lejano a los campamentos militarizados restringidos en este momento para nosotros. Tener nuevos proyectos y acceso a estos campamentos abriría mucho nuestro horizonte de trabajo. Es el terreno que estamos mirando y donde queremos entrar, ya que en un futuro no muy lejano todo pasará por estos campamentos.